Al aprobarse la reforma constitucional que veta la siembra de maíz genéticamente modificado y reconoce al maíz nativo como un “elemento de identidad nacional”, la diputada federal Xóchitl Zagal destacó el compromiso con la protección a la biodiversidad del país y la defensa de su patrimonio agrícola y cultural.

A través de sus redes sociales, la legisladora izcallense resaltó que con la contaminación genética de este cultivo se ponía en riesgo la gran diversidad de 64 razas que existen en el país y que lo convierten en “la cuna del maíz”.

“Hoy defendemos lo que nos hace únicos, pues es fundamental proteger el maíz nativo, nuestra salud, nuestros ecosistemas y el futuro de nuestros agricultores”, expresó.

Con esta reforma también se busca prevenir los efectos a largo plazo que el maíz genéticamente modificado pudiera tener en la salud humana, pues si bien aún no se conocen, genera preocupación entre la población, además de proteger a los pequeños productores, quienes podrían ser desplazados por grandes corporaciones, y mantener el equilibrio ecológico en las comunidades.

Finalmente, aseveró que con esta reforma “México da un paso firme hacia la preservación de su identidad cultural y agrícola, asegurando que las futuras generaciones puedan disfrutar de la riqueza del maíz nativo”.