A un paso de que la inflación supere en México el 9% y el dólar siga fortaleciéndose ante casi todas las monedas en el mundo, empresarios e inversionistas como la mexicana María Asunción Aramburuzabala Larregui, la quinta persona más acaudalada del país, eligen conducir con cautela sus inversiones.
La empresaria mexicana también conocida como Mariasún, suma una mala racha que empezó en 2019, cuando protagonizó un gran escándalo financiero en su empresa inmobiliaria Abilia, a lo que se sumó la acotación de su negocio tecnológico KIO Networks, el cual posteriormente terminó vendiendo a Squared Capital.
Además, con el surgimiento de la pandemia y subsecuentes restricciones de movilidad en el país, los cambios políticos en el gobierno y su aparición en la mega filtración de documentos llamada “Pandora Papers” en los que se le destapó como una ávida entusiasta de la utilización de empresas “offshore” para adquirir propiedades en el extranjero, habrían producido el distanciamiento de los negocios de la empresaria en territorio nacional.
María Asunción Aramburuzabala, heredera de Grupo Modelo, y quien en la actualidad acumula una fortuna aproximada a los 6 mil 180 millones de dólares, desde hace un par de años decidió apostar a otros mercados, como el estadounidense y el español, este último donde trabaja en un proyecto inmobiliario de viviendas de lujo en Madrid.
Asimismo, otros factores que jugarían en contra de la confianza de Mariasún en el clima de negocios mexicano serían la política monetaria del Banco de México, la cual ha mantenido sus incrementos en las tasas de interés; además, la empresaria tampoco vería con buenos ojos la situación actual del mercado bursátil mexicano, el cual ha sufrido importantes contracciones, tendiendo en agosto su peor mes desde 1998.
Lo curioso, radica en que, en una entrevista para Forbes, se le preguntó acerca del tipo de líder que era, y María Aramburuzabala respondió “una que siempre está al frente… y que cuando las cosas se ponen difíciles no se asusta y se esconde”; sin embargo, algunas de sus acciones parecen indicar lo contrario.
Su última gran decisión de desinversión o muestra de poca confianza en el mercado mexicano se dio recientemente con la venta de Medistik, una empresa de servicios 4PL que provee soluciones logísticas para distribución de medicamentos y accesorios médicos, la cual vendió a Grupo Traxión.
